EL NUEVO COCHE DE ALONSO

El nuevo bólido de Fernando Alonso, el MP4/22, comenzó a diseñarse a finales del año 2005 y se terminó el pasado verano. En todo este proceso tan solo ha conservado un cinco por ciento de piezas de las 11.500 que aproximadamente lleva el coche. De hecho, el ensamblaje del coche terminó apenas antes de Navidad, trabajando día y noche los últimos meses, y ha sido guardado con máximo sigilo hasta que anoche vio la luz en Valencia.

El nuevo monoplaza tiene el habitáculo mas bajo que el MP4/21, ya que cuando se ha estado diseñando, se ha hecho teniendo en cuenta las características de pilotaje de Fernando Alonso, el cual el 14 de diciembre de 2005 anunció ya su paso de Renault a Mclaren para 2007. Al respecto, hay que recordar que al bicampeón le gusta que el coche sea maniobrable y que la geometría de la suspensión delantera y el propio alerón frontal favorezcan al máximo las particularidades de su pilotaje, agresivo y frenando en el vértice de la curva.

También cambia en el nuevo coche la sujeción del alerón trasero, que estará apoyado sobre dos soportes centrales y en las paredes laterales, como lo tenía el Renault R26. El morro sigue siendo muy bajo y crecen los extractores de los pontones laterales, para canalizar mejor al aire hacia el alerón, aunque uno de los cambios más radicales que se han introducido en el nuevo coche es el difusor trasero.

También las entradas de los radiadores son algo más pequeñas que las del año pasado, lo que significa que el nuevo motor Mercedes va a refrigerar mejor y la cúpula de la toma de aire y del carenaje del motor es más fina que la de los últimos años.
Aerodinámicamente el coche también es un 95 por ciento nuevo en relación al del pasado año. El desarrollo del MP4-22 ha supuesto la fabricación de 4.500 componentes y 3.500 diseños, y un desarrollo aerodinámico avanzado y constante. En torno a un tercio del monoplaza será mejorado antes del inicio de la primera carrera. A este desarrollo seguirán nuevos componentes aerodinámicos que serán incorporados al coche cada 3 o 4 semanas a lo largo de la temporada. En fin, una verdadera obra de orfebrería diseñada para que McLaren recupere el papel protagonísta.